El jilguero travieso agarra una semilla y desaparece veloz hacia el encinar. La roca impasible del Montsant vigila la escena. Piedra blanca, tomillo, cardos al sol. Pequeñas viñas en terraza descienden las laderas. Sus vides de Garnacha expresan lavitalidad y frescor de una tierra escarpada y bella. Vivo y sabroso, Vinos del Paseante - El Pispa es un vino tinto con un perfecto equilibrio de fruta madura, toques minerales y notas de torrefacción.
MARIDAJE
Vinos del Paseante - El Pispa es un perfecto acompañante de carnes rojas a la parrilla, asados, estofados, civet, caza de pelo, setas, quesos de oveja, arroces, pescado azul a la plancha, bacalao, frutos secos…
NOTA DE CATA
VISTA
Picota con reflejos granates.
NARIZ
Fruta madura, toques minerales y notas de torrefacción bien integradas.
BOCA
En boca es vivo, sabroso y equilibrado.Deja a su paso un recuerdo fresco,frutal, que se disfruta largamente.
VARIETALES
GARNACHA
100%
ANALISIS
GRADO ALCOHÓLICO14%
CONTIENE SULFITOSSÍ
ELABORACIÓN (VINIFICACIÓN)
La uva Garnacha se vendimia manualmente y se fermenta en pequeños depósitos de acero inoxidable de 5.000 litros, donde el intimo contacto de la piel y el mosto libera aroma y color. Posteriormente el vino hace su crianza en barricas de roble francés y americano de 300 litros.
VIÑEDO (VITICULTURA)
Las viñas viejas de Garnacha formadas en vaso se cultivan en las faldas de la sierra del Montsant sobre suelo calcáreo arcilloso y producen vinos carnosos y complejos.
Tras finalizar la vendimia de 2015, los meses que siguieron tuvieron el comportamiento propio del clima mediterráneo: algunas lluvias nutrieron la tierra; después el invierno fue típicamente seco, como es habitual en este clima, pero a la vez fue un invierno poco frío, lo que nos hizo pensar que el ciclo de la viña se adelantaría. Así lo parecía hasta que llegó una primavera insólitamente generosa en lluvias, un poco más fría de lo que es habitual, y la naturaleza puso todo en su sitio para que la evolución del ciclo evolucionara como en un año normal.
El inicio del verano nos anunciaba que podría ser una gran añada si las cosas no se torcían. Junio y casi todo julio fueron cálidos, pero no más de lo normal en el Montsant. No obstante, el final del verano fue cálido y aceleró la vendimia y esto es exactamente lo que encontramos en la botella: un vino con las dos caras del verano 2016: frescor y madurez, conceptos idílicos cuando hablamos de una garnacha de la zona sur de la D.O. Montsant.